"Todos los LUNES compartiendo mis sueños y pensamientos contigo"

miércoles, 13 de mayo de 2009

Borrón y cuenta nueva


A veces cuesta. Cuando crees que ya has conseguido superar una etapa dura de tu vida, cuando crees que las heridas de un trompazo contra la pared ya están cicatrizando, “algo” llega y da al traste con todo: las heridas se reabren y esta vez escuecen mucho más porque estás más sensible ante cualquier ínfimo dolor. Pero poco a poco todo se va curando. Aparece ese yo interior que te grita que espabiles de una vez y que dejes de auto-compadecerte: la primera vez intentas hacerle caso, pero no te encuentras con fuerzas para ello e intentas engañarte poniendo de excusa a la astenia primaveral; la segunda vez te cuesta menos que la tercera y así, poco a poco, terminas sorprendiéndote a ti misma haciendo algo que no pensabas que fueras capaz de hacer: borrón y cuenta nueva. Sientes una fuerza indescriptible que te hace actuar de forma radical. Te da miedo que esos impulsos te abandonen pronto y, por ello, actúas con rapidez.

Ahora, ha llegado el momento. Ya no te da vergüenza salir a la calle luciendo esas antiestéticas cicatrices. Las llevas con orgullo, como heridas de guerra, y con ellas sigues con tu vida: el buen tiempo, los amigos, la familia, los planes de vacaciones… todo es buen motivo para disfrutar de la primavera de una vez.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Ey,he leido esta entrada justo en un momento de mi vida que lo necesitaba.
Voy a ver si puedo y me atrevo a lucir también esas heridas recién hechas q tengo como heridas de guerra.
Un besote

Joaquin dijo...

Yo estoy orgulloso de mis cicatrices, para mí indican por donde he pasado en mi vida, y son un recordatorio de lo que NO tengo que hacer, o en otros casos, de por lo que he pasado.
Un saludo Laura, y sé fuerte.

Silvy dijo...

Qué mejor época para cerrar heridas que la primavera. Con ese sol espléndido es más fácil expulsar lo que no queremos en nuestras vidas y llenarnos de energía.
besos

Tony Amesty dijo...

Toda marca presente fue herida pasada que nos recuerda lo que pasó....para intentar evitar de nuevo el dolor.

Un abrazo

Laura dijo...

Anónimo: no sé quién eres, pero me alegra saber que mi experiencia puede ayudar a otras personas, en este caso a ti, para intentar cambiar y mejorar. Muchas suerte.

Metallica: es bonito lo que dices. Lo que pasa es que a veces ese recordatorio duele demasiado, sobre todo cuando son motivos parecidos los causantes de esas heridas.

Silvy: a ver si es verdad lo que dices. Con paciencia y esperanza se puede conseguir casi todo.

Tony: sí, tienes toda la razón. Son heridas de guerra, testigos de las personas en la que nos hemos convertido con el paso del tiempo y de nuestras diversas vivencias.

Muchas gracias a todos por comentar. Saludos!!!

Mar dijo...

Siempre hay que mirar al frente, siempre. Seguir en el camino trazado y... tratar de olvidar las malas experiencias del pasado.

El problema es que no somos máquinas, y los recuerdos -cuando menos lo esperamos- surgen, y duele.

A VER SI DE UNA BUENA VEZ HACES DE VERDAD BORRÓN Y CUENTA NUEVA.

Muchos besos.

Flor de almendro dijo...

Efectivamente. (Casi) Nada es para siempre. ¿Por qué existen personas que, sin darte cuenta, pasan de estar siempre contigo al más absoluto de los olvidos?. Duele.
Personas a las que quieres mucho y las ves que poco a poco se alejan de ti.
Si es cierto que dejarás a seres queridos en el camino, pero encontrarás otros a los que igualmente querrás.
Pero si echas de menos a alguien mucho, llámalo. Habla con él, no dejes que tu falta de iniciativa acabe con una amistad.
Besos.

PARAPANIPLAJO dijo...

Desde que nacemos, que es la fase dela vida que yo conozco, y no por mi nacimiento –ya lejano en el tiempo- sino por el de seres de mi entorno, no dejamos de ir sumando y restando a nuestra vida. Sumamos situaciones, amigos, sensaciones… y curiosamente restamos lo mismo, en mayor o menor medida. Todo es un continuo intercambio de vivencias, y todas nos aportan experiencias que nos hacen crecer como individuos.
Una vez, ante un problema que me estaba preocupando, alguien me dijo que intentara hacer un pequeño ejercicio de imaginación. Me dijo que pensara en mí un mes después de ese momento en que estaba tan angustiado y si ese problema iba a ser para mí un problema realmente importante se resolviera como se resolviera. ¿Y un seis meses después?. ¿Y un año?.
Hay que añadir a nuestra mochila personal e intransferible, y tan nuestra como pueden serlo nuestras huellas dactilares, todo lo que queremos llevar de nuestras experiencias. Está claro que las hay positivas, negativas… pero lo importante es ir llenado nuestra mochila. El valor que demos a cada una de las cosas que a ella aportemos dependen gran medida de nosotros.
Te podría decir que nada de lo que hemos vivido se pierde: todo se transforma.
¿Has oído la canción de Jorge Drexler “Todo se transforma”?. Es una de mis canciones de cabecera, una preciosidad para mí y la oigo tantas veces!!!. Él aplica este planteamiento al amor. Yo querría que hicieras una lectura más amplia de su letra y lo apliques a todas las sensaciones que nos aporta la vida. A quien nos hace bien, a quien nos hace mal. Cómo la vida nos devuelve lo que damos…
Lau, no te conozco y he llegado a tu blog por pura casualidad, pero ha sido un placer leerte.
Y leerte en escritos llenos de ilusión tiene que ser, si me lo permites, la ostia (que por cierto nunca he sabido con certeza si se escribe con o sin h).
Lo que sí te mando es un beso, que aquí no me cabe la menor de que se escribe con b.

Laura dijo...

MAR: muchas gracias por tus palabras. Sí, a ver si de una vez lo consigo. El tiempo (casi) todo lo cura :D

NANY: lo sé, tienes razón. Aunque yo, en lugar de definirlo como "falta de iniciativa" creo que, en realidad, se llama orgullo. Intentaré corregirlo.

PARAPANIPLAJO: muchas gracias, de corazón. No existen palabras para agradecer lo que tu comentario ha significado para mí... y eso que ni siquiera sé quién eres. la canción la he oido un par de veces, por lo que no estoy muy familiarizada con ella. En cuanto pueda la escucharé con calma. Y gracias, me alegro que te haya gustado leerme. Ahora no estoy pasando por una época en las que tenga muchas ilusiones, pero prometo que mi próxima entrada no será tan triste como las últimas que he hecho. Otro beso (con b) para ti :D

Muchas gracias por vuestros comentarios.