"Todos los LUNES compartiendo mis sueños y pensamientos contigo"

lunes, 10 de agosto de 2015

EL ETERNO CAMBIO

 ¡Qué triste es hacerse mayor!, ir a esos lugares a los que ibas cuando eras niño y ver que ya nada es como antes. La papelería de tu barrio, donde comprabas rotuladores y cuadernos para el colegio, se ha convertido en una simple zapatería; ya no está esas pintadas que hiciste un día con tus amigos en las que te metías con un compañero de clase; la heladería donde os parabais a tomar algo ahora es una tienda de perfumes; incluso ese negocio que parecía inmortal, en el que veías en el escaparate las mismas camisas para hombres, año tras año, también ha cerrado para darle paso a una nueva joyería.

Es triste el paso del tiempo, sobre todo, cuando nos empeñamos en aferrarnos al pasado. Ya no eres un niño y no tienes el tiempo libre de antaño, cuando aprovechabas el verano para desaparecer de casa y que tu familia solo te viera para comer, dormir o cuando tenías que cambiarte de ropa… incluso a veces, ni para entonces.

Ahora tus obligaciones no suelen coincidir con las de tus amigos. Por eso, cuando estás de vacaciones es difícil poder quedar con ellos… y viceversa. El móvil te arde con propuestas cuando estás en tu horario de trabajo y tú te desesperas, pesando en esos veranos de más de tres meses, durante los cuales conseguías un moreno dorado envidiable. Ahora, te tienes que adaptar el amarillo nuclear de estar bajo la influencia de los focos de la oficina.


¿Dónde quedaron esas salidas a tus bares favoritos? ¿Esas jornadas interminables en el chiringuito de la playa? ¿Las conversaciones profundas en tu mirador preferido, desde el que se ve toda la bahía? ¿Las risas sin descanso y las aventuras alocadas? ¿Los juegos y las comidas y cenas a la orilla del mar? No se sabe pero lo que sí está claro es que ya están en el almacén de tus buenos recuerdos.

No hay comentarios: