lunes, 14 de diciembre de 2009
ZAKOPANE: DESPEDIDA ANTES DE NAVIDAD
lunes, 7 de diciembre de 2009
EL PERRO DEL HORTELANO
“Eres como el perro del hortelano. Ni comes ni dejas comer”. ¿Cuántas veces habremos dicho o nos habrán dicho ese refrán? ¿En cuántas situaciones diferentes podrá ser empleado? ¿Y hasta qué punto esto es verdad?
Sí, siempre alguna vez somos y seremos el perro del hortelano. Tenemos noticias de alguien de quien no sabíamos hace tiempo y descubrimos que su vida está mucho mejor que la última vez que lo vimos. Un antiguo amor, por ejemplo, ha rehecho su vida con otra persona diferente y descubres, sin que te haga mucha gracia, que no es algo que te alegre demasiado. ¿Por qué te molesta? No pueden ser celos, porque hace años que te olvidaste hasta de la existencia de dicha persona; y tampoco puede ser envidia, porque tu vida incluso está mucho mejor que la suya. ¿Entonces? ¿Qué turbios sentimientos son los que te atormentan?
Puede que volver a saber de esa persona te haga pensar en el pasado y que te obligue a replantearte muchas cosas. ¿Hice bien en elegir este camino y desechar este otro? ¿Cómo hubiese sido mi vida si hubiera pensado en ese momento de otra manera? ¿Si ahora se me volviera a plantear la opción de elegir qué sería lo que haría?
Sí, definitivamente todos somos como el perro del hortelano. No comemos ni dejamos comer porque la comida, si se queda en el plato, siempre podremos usarla cuando nos apetezca pero si nos la quitan, nuestra oportunidad de comer pasará de largo para siempre.
miércoles, 18 de noviembre de 2009
LA CIUDAD DE 'LA RUTA DE LOS DUENDES'

Los pequeños duendes de bronce que se encuentran, en su mayoría, en el casco antiguo de Wroclaw, se han consolidado como un símbolo de la ciudad. Todos los turistas que llegan y se enteran de esta ‘curiosa plaga’ se quieren unir al juego de encontrarlos a todos. El problema es que, aunque ya existen mapas que puedes comprar por tan sólo 6 zlotys (aproximadamente 1 euro y medio) y que te indican dónde se hallan 30 de dichos duendes, es imposible localizarlos en su totalidad. Y es que, la velocidad con que brotan dichas esculturas impide saber el número exacto de duendes que salpican las calles de esta enigmática ciudad polaca.
La Alternativa Naranja fue un movimiento contestatario (famoso en los años 80) que surgió como protesta, forzosamente tímida pero imaginativa, contra la declaración de la ley marcial en Polonia y el absolutismo comunista. Cientos de ciudadanos se manifestaban paseando su muda reclamación de democracia, vestidos con ropa de color naranja y teniendo como símbolo un duende.
El periodo de ley marcial en Polonia (1981-1983) tuvo lugar cuando el gobierno de la República Democrática restringió drásticamente la vida normal. La frase en polaco es “Stan Wojenny” (“estado de guerra”). Aunque el país permaneció en paz durante este periodo, los movimientos democráticos fueron prohibidos y sus líderes, encarcelados. La ley marcial fue la causa de un gran número de muertes. Sus responsables hablaron de una docena de víctimas mortales aproximadamente, pero una comisión parlamentaria entre 1989 y 1991 arrojó unas estadísticas de unas 90 muertes. La ley marcial tuvo también consecuencias económicas negativas. Fue establecida una “reforma económica” que se sumó a un gran aumento de precios, como resultado de que los ingresos de la población cayesen considerablemente. Tras la caída del comunismo en Polonia en 1989, se determinó que la ley marcial había sido declarada en una clara violación de la constitución polaca. Por todo ello, no sorprende en absoluto que esta dinámica capital haya hecho de los duendes su ejemplo y estandarte.
Wroclaw, en recuerdo y homenaje a aquel movimiento anticomunista, ha salpicado su geografía con estos minúsculos monumentos.
martes, 10 de noviembre de 2009
TE DESEO… ODIAR
Odio que no seas capaz de hablar conmigo del tema.
Odio que finjas que no te importa.
Odio no poder odiarte.
Desearía poder odiar cada vez que te veo.
Desearía poder odiar cada vez que nuestras miradas se cruzan.
Desearía poder odiar cada vez que noto cómo me miras cuando crees que no te veo.
Desearía poder odiar cada vez que te pones nervioso cuando, sin querer, nos quedamos el uno junto al otro.

Desearía dejar de desearte
Desearía poder odiarte
miércoles, 4 de noviembre de 2009
NOCHE BLANCA
Y yo, obediente, abro la ventana, aún a riesgo de morir congelada. Congelada como el agua que veo volar por el aire. Saco la mano un segundo y compruebo que cae a ella cinco puntitos blancos.
Emocionados, bajamos a la calle, creyendo que ya podremos jugar con la nieve y hacer muñequitos. Pero la lluvia es escasa. Y en el suelo la nieve no llega a cuajar todavía. Muerta de frío, subo corriendo de nuevo a mi habitación. Otro día será. Sobre todo, viviendo en Wroclaw.
Pasan las horas y se hacen las 4 de la mañana. Y me levanto para correr la transparente cortina. ¡Cómo si sirviese de algo!. En el último momento me detengo. El paisaje es totalmente diferente al que antes había visto. Mejor dicho, diferente a todo lo que yo he visto en mi vida. Es lo que tiene vivir en una ciudad tan calurosa como Murcia. La repisa del balcón se ha vuelto blanca, los coches están cubiertos por una gruesa capa de nieve y la carretera se ha vuelto bicolor...

lunes, 26 de octubre de 2009
TOMAR EL AIRE

jueves, 15 de octubre de 2009
EL AEROPUERTO
Llego al aeropuerto, pago al taxista, le doy las gracias y me meto a buscar la zona de las llegadas. Miro en el panel. El vuelo de Alicante llega en 20 minutos. Respiro aliviada y compro algo de chocolate en la tiendecita más cercana. El taxista ha sido muy simpático, pero conduce como cualquier polaco: a 90 kilómetros por hora y dando bandazos sin parar. Necesito azúcar para que se me pase el mareo.

Me siento en una de las sillas y espero impaciente. 15 minutos. 10 minutos. 5 minutos. Al final, las puertas se abren. ¡Por fin!. Me quedo observando. A mi lado hay un chico que tiene los mismos nervios contenidos que yo. Pero él tiene más suerte. Su chica llega junto a él y se abrazan con fuerza. Se besan emocionados. Y se van a disfrutar el uno del otro. Al rato, es una chica la que está dando vueltas. Se sienta, se levanta y se pone a caminar. Hasta que llega un momento en que se para en seco y saluda a un grupo de chicos. Amigos que han ido a verla. Y se van todos juntos.
Hasta que, al final, soy yo la que veo aparecer figuras conocidas. Soy yo la que se levanta del asiento sin poder dejar de sonreír. Y soy yo la que, en esos momentos, se siente observada por los que todavía siguen esperando.
martes, 13 de octubre de 2009
MI NUEVO HOGAR

Creo que ya me he acostumbrado a la nueva vida de aquí. He aceptado por fin que no estoy en el típico viaje de estudios en el que creía encontrarme los primeros días. He comenzado mis clases, mis asignaturas. Algunas clases entretenidas, otras divertidas, otras un poco aburridas. Como en todos los sitios. Paseo por Wroclaw con amigos, yo sola, e incluso dentro de poco lo haré con parte de mi familia, como lo haría en Murcia, y pensar en eso hace que me sienta por fin en mi ciudad. Al fin y al cabo, durante los próximos cinco meses va a serlo, y por fin noto que es así. Llego a la residencia y consigo pensar que he llegado a casa, a mi habitación, a mi cocina, a mi baño. ¡Hasta he conseguido por fin que me pongan Internet! Y, sabiendo que aquí en Polonia el estrés no es precisamente deporte nacional, es algo que tiene mucho mérito.
Polonia es un país tan diferente… y los polacos, a pesar de su aire de personas frías e inaccesibles que permite confirmar los tópicos internacionales, son simpáticos y agradables. Les preguntas por una dirección y, en lugar de darte las indicaciones, te llevan hasta el lugar. Anécdotas así te hacen pensar que el refrán de ‘las apariencias engañan’ se cumple.
jueves, 8 de octubre de 2009
MI ESTANCIA EN WROCLAW (POLONIA).

La experiencia es maravillosa. Conoces a tanta gente, de tantas partes, cada uno con su historia personal, con los que compartes muchas vivencias casi a diario. Por eso, me resulta imposible hacerme a la idea de que tan sólo hayan pasado 14 días y que, sin embargo, haya tantos recuerdos de mi estancia aquí. Me encuentro en el Starbucks, porque aún no tengo Internet en mi residencia, y me pongo a pensar en mi primera mañana en Polonia, cuando vine precisamente a este local para poder hablar con mi familia. Y solamente hace dos semanas de eso.
Solamente llevo dos semanas y siento que estoy aprendiendo muchísimo, mucho de la vida, de las personas y, sobre todo, mucho de mí. Me doy cuenta de que en ciertos aspectos me infravaloraba bastante, ya que soy capaz de hacer cosas por mí misma que nunca me hubiese imaginado que pudiera realizar; y también estoy aprendiendo a ser más tolerante conmigo misma y no forzarme demasiado en otro tipo de cosas.
martes, 15 de septiembre de 2009
LA MONTAÑA RUSA

Decido que nos subamos a la montaña rusa. La idea te asusta, porque siempre has intentado evitar las atracciones más ‘peligrosas’. Y lo habías conseguido hasta hoy. No has querido decirme que no porque ves el brillo de mis ojos ante el deseo de descargar la adrenalina en esa montaña. Y, por eso, optas por armarte de valor para concederme el gusto.
En solamente minuto y medio que dura el recorrido nuestras vidas dan un giro de 180 grados. Al igual que nuestros cuerpos subidos en el aparato. Tu valentía ya se ha agotado o, en realidad, puede que haya llegado a su punto álgido; por eso, sin pararte a pensar ni un solo segundo, me gritas: “no me gustaría morirme sin que sepas lo mucho que te quiero”.
En esos momentos, me siento mareada. Necesito bajar. Necesito “saber que el suelo sigue aquí bajo mis pies”. Pensar que no ha sido el mejor momento para ponerme a recordar la letra de una canción me hace gracia. Y tengo ganas de llorar. Y de reír. Y de gritar. Y de dar saltos de alegría. No estoy segura de haber oído lo que realmente has dicho, lo que tanto tiempo he soñado que me dijeras y lo que tanto tiempo llevo sintiendo por ti y nunca me había atrevido a confesarte.
Bajamos de la montaña rusa e intento descubrir en tu cara que lo que me has gritado ha ocurrido de verdad. Observo que estás cabizbajo, sin atreverte a mirarme a los ojos, evitando a toda costa que nuestras miradas se crucen. Al final, sin poder soportar ni un segundo más la incertidumbre, tartamudeando un poco, consigo reunir las palabras para formar la pregunta: “¿es verdad lo que me has dicho en la atracción?”. Me miras y ves en la expresión de mi cara lo que quiero que contestes. La pregunta sólo tiene dos posibles respuestas y notas en mi mirada expectante cuál es la que quiero escuchar.
Satisfecho, relajado y contento sonríes y me besas. En esos momentos, deseo poder congelar el tiempo y quedarnos siempre así, unidos como imanes, sin pensar en nada más. Sin preocuparnos por el mundo que nos rodea. Solamente existiendo tu y yo en un mundo nuevo creado por nosotros dos.
sábado, 12 de septiembre de 2009
DE ESTACIÓN A ESTACIÓN... ¿REALIDAD O FICCIÓN?

El otoño. Días calurosos y noches frías. La etapa de la melancolía. Mientras paseamos, no puedo evitar suspirar profundamente. Él me mira de forma fugaz, pero no dice nada. Comienzo a sentir frío. La noche ha refrescado bastante y yo me resisto a dejar en el armario la ropa de verano. Por eso, mis brazos desnudos están congelados. Él, muy atento, se da cuenta y, de forma un poco dubitativa, decide abrazarme rodeándome los hombros para frotar mis brazos y conseguir así que entren en calor. Nuestro primer contacto algo más íntimo que los cordiales saludos y las estrictas conversaciones de dos conocidos. El gesto me pilla desprevenida y un ligero escalofrío me recorre el cuerpo. El chico deja de abrazarme y me sonríe. Yo le doy las gracias.

En invierno ya voy preparada. O al menos eso creo. El extraordinario frío de la ciudad me obliga a ir con uno de mis jerseys más gordos, mi abrigo, mi bufanda y mi gorro. Ya hemos cogido más confianza y, ahora, se ha convertido en una persona bastante irónica. Se ríe de mí y dice que parezco un muñeco de nieve. Yo le digo que eso no es posible, porque mi nariz no tiene forma de zanahoria. Él me la pellizca y se ríe al notar que parece un cubito de hielo. Decido vengarme y le meto las manos por el cuello de su cazadora. Me percato de que se ha quedado tan estupefacto que su cara se ha vuelto de un tono rojo tomate y él intenta desviar la atención gastándome otra de sus bromas.

El frío va desapareciendo y los árboles comienzan a florecer. La culpa es de la primavera. Por eso, se para en el parque para robar una de las rosas y regalármela. “Una flor para otra flor”, me dice. Enseguida, rectifica y dice que eso es lo que me diría para intentar conquistarme. Finjo enfadarme y le pego en la espalda. Él se ríe y me da un beso en la mejilla para que le perdone. No puedo evitar sonreírle. Al rato, nos sentamos en un banco. Él hace comentarios sobre las chicas que pasan y, por eso, decido hacer lo mismo con los chicos, pero noto que se pone ‘celoso’.
Por fin llega el verano. Las vacaciones. La playa. Me quedo tumbada sobre la toalla tomando el sol, a pesar de que él ha hecho todo lo posible para intentar convencerme de que me bañara. Al final, resignado, se mete en el agua y aprovecho para ponerme las gafas de sol y dormir algo de siesta. Al rato, me percato de que está de pie, observándome. Lo sé porque he sentido que el sol no me quema tanto el cuerpo y porque se ha oscurecido bastante mi visión a través de mis ojos cerrados. Sin apenas darme tiempo a reaccionar, noto que vuelo y que me elevan como si no pesase nada. El contacto con su cuerpo mojado me hace gritar y forcejeo intentando liberarme de sus brazos. Pero es demasiado fuerte y ya me ha metido en el agua. Nos caemos el uno encima del otro y no puedo dejar de reír a carcajadas. Me río hasta que empiezo a toser por el agua que he tragado. Él me confiesa que le encanta mi risa. Nos miramos fijamente, intensamente, profundamente. Estamos tan cerca que puedo sentir su aliento sobre mi cara.
Y después, todo terminó de la misma forma increíblemente rápida con la que comenzó. “En el amor, el dolor es proporcional a la belleza de la historia que has vivido”… Eso, al menos, es lo que dice el escritor italiano Federico Moccia.
domingo, 6 de septiembre de 2009
MI MES DE AGOSTO EN EL DIARIO 'LA OPINIÓN'

Y… ¡¡¡por supuesto que he elegido bien!!!. Es la única elección en mi vida de la que no me arrepiento, de la que me siento orgullosa y de la que cada día me siento más feliz de haber realizado. Trabajar en lo que de verdad te gusta y te llena es una de las mejores cosas que te pueden suceder en la vida. Y me ha ocurrido A MÍ. Aún no me lo puedo creer y todavía me siento como en una nube. Trabajar del y por el periodismo. ¡Guau!
Y ya no sólo eso. No solamente he conseguido elegir una profesión que me encanta hacer. Dicen que las primeras prácticas son fundamentales para estar motivado y para comenzar con ganas tu nueva andadura. Mucha gente ha decidido tirar la toalla por no haber tenido una buena experiencia en sus primeras prácticas. Y el caso contrario, mi inolvidable experiencia, puede que haya conseguido que ame el periodismo muchísimo más de lo que ya lo hacía antes, porque antes lo quería desde la ignorancia y, ahora, ya con algo de conocimiento. Y ME ENCANTA. No hay otra cosa que me guste más hacer.
Y toda esta experiencia, estos 21 días inolvidables, se los debo al ambiente de trabajo, a mis compañeros, a todas esas personas que desde el principio me brindaron su apoyo y su hombro en el momento en el que lo necesitara. Pero nunca lo necesité, porque siempre me estuvieron enseñando y corrigiendo de forma paciente y cariñosa, sin un mal gesto ni una mala cara en ningún momento. ¡Al contrario!. Cuando tenían que corregirme en algo, eran ellos los que se sentían apurados de decirme cualquier cosa, porque se pensaban que me podía molestar. “¿Cómo me voy a molestar si precisamente estoy aquí para eso?”. Y cuando yo conseguía hacer algo 'perfecto', como tener una buena idea, dar con el titular adecuado (lo más complicado en periodismo escrito), hacer una buena entradilla o escribir un texto con enganche no dudaban en alabarme y en decirme que estaban muy contentos con lo trabajadora que era y con las ganas que ponía en todas mis páginas.
Además, estoy muy contenta, porque trabajar en la sección ‘especiales’ del periódico 'La Opinión de Murcia' me ha permitido descubrir y conocer las estupendas y maravillosas fiestas y costumbres que se realizan en muchos de los pueblos de nuestra región.
También he aprendido que se puede conocer a gente humilde y generosa en mundos tan fríos como son la fama y la popularidad. En estos casos, me refiero a Marifé de Triana, que incluso me ha invitado a su casa cuando vaya a Sevilla y me ha ofrecido su amistad incondicional; Noomi Rapace, la protagonista de la película sueca de moda: “Millennium I: Los hombres que no amaban a las mujeres”, prefirió perderse una tarde en la playa con su marido y con sus hijos para concederme una entrevista en la cafetería del hotel Don Juan, lugar en el que se hospedaba durante sus vacaciones en la localidad murciana de Águilas. Que una artista internacional como ella se interesara por mis prácticas y mi carrera son cosas que no olvidaré nunca.
jueves, 20 de agosto de 2009
MENTIRAS Y CINTAS DE AUDIO

Pero tu alma de vidente te hacía presagiar lo peor… o, para no ser tan catastrofistas, esperabas encontrar en cualquier momento ese pequeño gran detalle que tenía que estar oculto por algún sitio no muy lejano. ¡Pero nada! Los días pasaban y tú seguías sin ver lo malo que sabías que tenías que encontrar. Él, muchísimo más listo de lo que te habías imaginado, se daba cuenta de lo que te ocurría y, por eso, decidió “abrirse a ti”, para que confiaras en él mucho más de lo que ya lo hacías.
¡Qué tonta fuiste!. Te creíste todo lo que te contó. Todo lo que querías oír salía de su boca sin parar, como una metralleta. Y caíste en el anzuelo. Su voz te atrapó al igual que lo hace la cinta de audio de una grabadora. Y sentiste pena por sus desgracias. Querías ayudarlo. Tenías la necesidad moral de permanecer a su lado y encontrar una solución a sus problemas. Lo que nunca imaginaste es que lo único que estaba haciendo era añadir dificultades a los tuyos propios.
Y ahora podrías seguir engañada, podrías seguir siendo una marioneta en manos de un ser manipulador que ni siquiera te llega a la suela del zapato. Porque ha demostrado ser un falso, un mentiroso y, sobre todo, un excelente actor, que finge a la perfección sentir un profundo afecto por ti, cuando lo único que ha hecho desde que lo conociste ha sido intentar poner tu vida patas arriba.
Pero el refrán ya lo dice: “se pilla antes a un mentiroso que a un cojo”. Por suerte, este mentiroso ya ha sido arrestado y metido en prisión preventiva.
lunes, 27 de julio de 2009
ÉL

Ese alguien es ÉL. Quería hacerle reír al niño y lo ha conseguido… ¡vaya que si lo ha logrado!. El crío está riéndose a carcajada limpia y él es el culpable de ello. Se siente muy feliz y orgulloso de sí mismo. El sentido del humor es una gran táctica que tiene para desconectar y evadirse de los problemas; y, a la vez, al niño no le viene nada mal reírse tanto como lo está haciendo en ese momento. Está matando dos pájaros de un tiro. Está consiguiendo un beneficio mutuo.
El chico no para: los caballos, el deporte y el teatro son algunas de las grandes aficiones que le hacen llevar la vida que él desea. Aunque no siempre es así; a veces, en su mirada desaparece la juerga y el cachondeo y sus ojos se nublan. Está pensando. Está dándole vueltas a la cabeza. La ironía es la gran coraza que utiliza para protegerse. Pero esa barrera es demasiado frágil como para poder defenderla las 24 horas del día. ¿Qué se esconde en él?. ¿Por qué no se sabe nunca cuándo actúa en serio y cuándo lo hace de broma?. ¿Será miedo?. ¿Temor a tropezar en la misma piedra y que le vuelvan a hacer daño?. No quiere sufrir. Por ello, se ha decantado por la observación. No deja de mirar a los que tiene a su alrededor para poder saber desde el principio cómo son. Así se evitará muchos problemas.
Pero lo que necesita, lo que realmente necesita para “pasar página” es encontrar a esa persona que sepa quererlo y amarlo con todas sus virtudes (que no son pocas) pero, sobre todo, con las cruces que le han tocado llevar en su vida. Las cargas, si se llevan entre dos personas, no son cargas dobles: son cargas compartidas. Y no dudo ni un instante de que al final terminará consiguiéndolo.
lunes, 20 de julio de 2009
JUGAR CON FUEGO

Tus alarmas han saltado y las palabras de “peligro inminente” resaltan por todas partes. Pero tú ni las ves ni quieres verlas. Imaginarte el brillo del fuego, su color, su olor y lo que se puede lograr con él consiguen en ti un efecto enfermizo. Y no digamos ya cuando tienes esa gran arma letal en tu poder. Lo sabes, todo el mundo sabe que ser un pirómano no es nada bueno. Que a la larga solamente conseguirá hacerte daño. Pero te has acostumbrado al bienestar que te produce a corto plazo y no dejas de explotar esta nueva sensación que te encanta. No puedes evitar ser un pirómano. Ya es demasiado tarde… LO NECESITAS. Te bastó una sola vez para descubrir que era algo imprescindible en tu vida, casi tanto como el aire que respiras.
miércoles, 15 de julio de 2009
DÉJÀ VU

Las vacaciones dan para mucho: tienes tiempo para descansar, para pasarlo bien con los amigos, para estar con la familia… pero, sobre todo, tienes mucho tiempo para pensar, para imaginarte cosas y para inventarte historias. Hay que ejercitar la mente sin parar para que no se oxide. Y una de las cosas que siempre me ha caracterizado es mi gusto por inventar historias. De niña me tragaba con mi abuela todos los culebrones de la tele y, como todos sabemos, en estas series pasa todo lo inimaginable. Puede que eso sea otro de los motivos que me llevó a mi gusto por escribir. Con el tiempo, mi abuela murió y yo ya no vi motivo alguno para seguir viendo telenovelas, pero mi interés por inventar historias (algunas las plasmaba en papel y otras, sin embargo, no salían de mi cabeza) siguió latente en mí.
Pero esta historia… una historia inocente que comenzó para matar el aburrimiento mientras estaba tumbada sobre la arena de la playa y que incluso se metió por la noche en mis sueños, no se quedó en una simple invención. Días después se iban sucediendo diversos acontecimientos que desembocaron en que gran parte de esa historia se cumpliese. Todo era tan increíble que tardé bastante en pensar: “¿de qué me suena todo esto?, ¿no es algo que ya he vivido?”. Y mientras me hacía para mí misma estás preguntas, venía a mi mente mi relato, y una mezcla de asombro y desconcierto se apoderaba de mí.
Sí, los déjà vu existen.
jueves, 9 de julio de 2009
MIS PRÁCTICAS EN EL DIARIO LA OPINIÓN DE MURCIA

¡Claro que sí!. Por supuesto. Mientras ella me decía que mi jornada laboral será de lunes a sábado, que comenzaré a las 11 de la mañana y que, como muy pronto, podré terminar a las 8 de la tarde (porque en esta profesión se sabe a la hora que se entra, pero no a la que se sale), yo no podía dejar de repetir: “¡Claro que sí!. Por supuesto”.
Estoy muy nerviosa ante lo nuevo y desconocido pero, a la vez, estoy feliz y orgullosa de mí misma: empiezo en el medio escrito, en el que más me ha gustado desde siempre, desde que hace más de 7 años descubrí que me quería dedicar a esto y que no me veía haciendo ninguna otra cosa. Y después de tanto tiempo y de disfrutar de los dos primeros años de una carrera que me ha gustado y me ha llenado mucho más de lo que me esperaba, consigo por fin la oportunidad de comenzar a trabajar de PERIODISTA.
jueves, 2 de julio de 2009
TU PRIMERA MALA EXPERIENCIA
Todo lo que sé y he vivido me gustaría poder resumirlo en unas cuantas palabras que de golpe y plumazo te ayudaran a olvidar. Querría que pudieras entrar en mi cabeza para que fueras testigo de los golpes que me he dado contra la pared y así evitar que tú te dieras los tuyos. Pero si algo he aprendido en todos estos años es que cada uno tenemos nuestros propios golpes y nuestras propias paredes y que, por mucho que yo te diga, no puedo evitar que termines sufriendo. Mi instinto de “hermana” mayor (o incluso de “madre”, pero esto último no quiero reconocerlo porque me hace sentir vieja) hacen que me sienta impotente ante lo que estás viviendo y que tus sufrimientos sean también los míos.
Eres una chica estupenda. Aún recuerdo la primera vez que te vi… ¡eras horrorosa!. Pero con el tiempo te fuiste transformando en una persona con un corazón de oro, con unos ojazos que cautivan a todo aquel que se atreve a mirarte, con esa risa tan especial que contagia a los que tienes a tu alrededor por ser un regalo caído del cielo, esa bondad que te hace estar siempre dispuesta a agradar y a ayudar a las personas a las que quieres… todo ello es como un hechizo que enamora y seguirá enamorando a más de uno. Sin embargo, ahora eres tú la que tienes el corazón roto.

Por eso, tu máxima prioridad en estos momentos es curar tu corazón: pasa página. Rodéate de la gente que te preste su hombro para llorar en los momentos escasos en los que tú lo necesites y solamente cuando tú lo pidas y, sobre todo, de gente que te haga reír a carcajadas con esa risa contagiosa tan maravillosa que tienes.
Esta primera mala experiencia que has vivido, a la larga, te servirá para valorar mucho mejor las infinitas buenas experiencias que te esperan, debido a que la gente que te conozca y que te tiene aún que conocer son y serán testigos de tu gran belleza interior y exterior. Porque con sólo mirarte eso se nota. Y, en esta ocasión, nadie se equivocará al llegar a tales conclusiones. Con todo esto aprenderás que la vida no es tan de color de rosa como te imaginabas (aunque, por supuesto, no es tan negra como siempre te la he intentado hacer ver).
Sé que es difícil: créeme. Todos pasamos por eso alguna vez. La pregunta que más te haces y te seguirás haciendo mientras sigas pensando en esto siempre será ¿POR QUÉ?. Y, desgraciadamente, eso no tiene respuesta totalmente correcta y sincera. Puede que incluso ni él mismo la sepa con total certeza. Pero como dice una canción de un antiguo cantante italiano que puede que te suene: “La vida es así. No la he inventando yo”.
Aunque pienses que no tengo derecho a hablar así, porque no conozco tu caso concreto, estás equivocada: el comportamiento de esa persona es mucho más importante que la forma de ser que tuviera contigo o la personalidad que tú creías que tenía. Hasta cuando conoces a una persona desde hace años, te termina sorprendiendo con un comportamiento que nunca te hubieras imaginado que tenía. Por eso existen los divorcios y las separaciones. Querer y amar a una persona no es suficiente. Muchos otros factores externos son los que terminan rompiendo a algunas relaciones. Cuando las cosas no pueden ser, no pueden ser.
Sé que pensarás que es muy fácil decir todo esto, pero que hacerlo es mucho más complicado. Me conoces y sabes que ni yo misma soy capaz de poner en práctica las cosas que te digo. Pero una gran cualidad que tienes y de la que me encantaría contagiarme es la de la fortaleza. Tú que puedes, porque tienes el carácter suficiente para hacerlo, levántate del suelo y sigue con tu cabeza bien alta demostrando ser la misma chica maravillosa del que todo el mundo estaría encantado de enamorarse.
miércoles, 1 de julio de 2009
BUSCANDO EL PAPEL EXTRAVIADO

Para mi sorpresa, en la búsqueda tropecé con cosas que no esperaba: regalos de hace mil años, escritos míos de cuando era una cría que no levantaba dos palmos del suelo y un sin fin de cosas que no sabía ni que siguieran existiendo.
Pero lo que más me impactó fue encontrar un pequeño diario. En él me dedicaba a escribir 4 ó 5 frases de lo que me había pasado en el día y abarcaba un periodo de tiempo de casi un curso entero. Me puse a hojearlo sin poder dejar de sonreír.

En otras partes del diario, sin embargo, recordaba lo que narraba como si hubiese ocurrido el día anterior. Mientras leía, mi mente se había trasladado a ese lugar y a ese momento.
Podía incluso acordarme de la ropa que llevaba, si estaba triste o contenta, si me dolía la cabeza o si me sentía más fresca que una rosa. Notaba el calor o el frío según la estación o época del año, las cosas que me convertían en la chiquilla más feliz del mundo y lo que me impedía centrarme en los estudios, en dormir, en comer… y hasta en respirar con normalidad sin sentir pequeños vacíos en la boca del estómago.
Mientras leía estas partes del diario, a un ritmo más lento y sosegado, mi mente se adelantaba a los acontecimientos. Sabía lo que iba a pasar a continuación y por eso, casi me sentía con la necesidad de viajar en el tiempo para avisar a la Laura adolescente de lo que estaba a punto de ocurrir.
Pero si eso pudiese suceder, si pudiese avisar a esa chiquilla de que lo que iba a hacer era una tontería y que le daba tiempo a actuar de una manera totalmente diferente, ese diario no tendría razón de ser. Automáticamente, desaparecería de mis manos para no existir o para ser el diario de una persona diferente. Y en cualquiera de los dos casos, la Laura veinteañera tampoco sería la misma y no tendría las escasas buenas y/o malas experiencias que hacen que mire el diario sintiendo algo de nostalgia.
lunes, 29 de junio de 2009
PARECIDOS RAZONABLES
viernes, 26 de junio de 2009
ELLA (HISTORIAS II)

Sus miradas se cruzan y la chica ve en los ojos de él un brillo especial, alejado de la chulería habitual. Ese brillo que siempre asoma a sus ojos cuando la mira. ¿Ella era capaz de cambiar a un hombre y de volverlo más humano?. ¡Menuda bobada pensar así!. No, lo que ocurre es que es la única que no está afónica dando gritos, la única que no lo trata como si fuera un dios o un ángel caído del cielo. Y eso a los hombres les afecta a su ego, sobre todo a personas como él. Pero algo en su interior le hace rechazar esta última teoría. Él no es solamente ese gran deportista admirado y envidiado por todos. Ella lo sabe. Lo ha observado durante mucho tiempo. Lo ha visto actuar y casi podría asegurar que puede leerle la mente… Aunque no siempre es así. A veces, las piezas del puzzle son demasiado parecidas y ella tarda mucho en darse cuenta de que se ha equivocado al encajarlas. O mejor dicho, se ha equivocado en escoger un puzzle tan difícil como él. Pero es algo superior a sus fuerzas.
El partido termina y el jugador vuelve a mostrar esa sonrisa de superioridad. “¡No, por favor!, muéstrame una sonrisa dulce, cariñosa, una sonrisa donde me digas que no eres como la gente piensa. Que mereces la pena. Que puedo ser esa persona que buscas”.
La chica despierta de la ensoñación. La cabeza vuelve por fin a dominar sobre su corazón. Se levanta y se marcha tranquilamente mientras todos gritan y aplauden por la victoria.
¡Hasta el próximo partido!
miércoles, 24 de junio de 2009
HISTORIAS

sábado, 20 de junio de 2009
OTRO CURSO QUE TERMINA

Intento pensar en el primer día de curso. Parece algo tan lejano… pero, a la vez, no es creíble pensar que han pasado nueve meses de aquello. “Un embarazo” donde no han parado de pasar cosas. Como todo proceso de gestación, no todo ha sido un caminito de rosas; pero lo importante es que hemos disfrutado de los 9 meses con la ilusión de cualquier madre primeriza que ve engordar poco a poco su cuerpo y que sabe que se debe a que otra vida crece en su interior.
Hay que reconocer que no todo han sido sucesos buenos, pero estos últimos son los que han predominado y con los que me quedo; porque lo mejor que tenemos es que sabemos disfrutar de cada pequeño detalle que nos ha ocurrido. Y que ir a la universidad se ha convertido día a día en una aventura donde cualquier anécdota se transforma en objeto de risas durante el resto de la jornada. Por todo ello, da pena terminar, da pena comprobar que el tiempo pasa demasiado rápido y que todo lo bueno dura poco. Y que cada vez queda menos para que la experiencia universitaria llegue a su fin.
Feliz verano a todos.
lunes, 15 de junio de 2009
EGOCENTRISMO

jueves, 11 de junio de 2009
LA MADRUGADA

miércoles, 10 de junio de 2009
IMAGINACIÓN
Pero últimamente parece que tu cabeza se aburre, que no tiene suficiente con sus ocupaciones cotidianas, y le ha dado por imaginar: imaginas mientras duermes y mientras se supone que no duermes… y, en esta segunda opción, a veces se cuelan en tus escenas oníricas una melodía, una banda sonora que intenta conseguir animar un poco tu creación fílmica. Y entonces, mezclas escenas de tu vida real con escenas imaginadas. O, directamente, acontecimientos reales los modificas para que queden mejor en el estilo de película comercial que pretendes hacer. Tendrás que conseguir así que se convierta en éxito de taquilla, ¿no?. Puff, estás jugando con Fuego y no deberías hacerlo… ¡Déjalo sin amigos!.

Ya tienes un pequeño borrador de tu proyecto. Por ello, te sientas en el cine con tu enorme cartón de palomitas en la mano para ver la película dirigida y protagonizada por ti. ¿Crees que gustará a la gente?. ¿A lo mejor aburre un poco?. ¿El argumento no está ya muy visto?. ¿No has introducido nada original que pueda enganchar?...
Pues no sabría qué decirte para no hacerte sentir mal, pero creo que lo mejor que puedes hacer es dejar que las películas que te montas en la cabeza sigan estando ahí. O podrías buscarte otra mejor forma de entretenerte. O, también, deberías dejar de ir tanto al cine si ves que eso te afecta demasiado… perdona, me he tenido que reír. No dejas de sorprenderme. Eres una persona demasiado excéntrica. Quizá eso sea una de las cosas que más me gusten de ti.
lunes, 8 de junio de 2009
EL DESTINO
¿No es la vida como un juego?, ¿no tiene bastante parecido con estas formas de entretenimiento que tantas horas y horas de vida nos pueden hacer perder? A lo mejor, lo que nosotros definimos como “destino” en realidad es un videojuego, uno de esos que tanto enganchan en cuanto los pruebas y que consiste en pasar y pasar pantallas, niveles de dificultad. Sí… a lo mejor ésta es la verdadera respuesta. Puede que nuestra vida se base precisamente en eso, en pasar niveles, que todos juguemos el mismo juego (el juego de la vida) y que eso haga que muchas situaciones que vivimos sean iguales o parecidas a las de otra persona.

Entonces… ¿qué es lo que nos diferencia?. Si todos estamos jugando a lo mismo ¿qué es lo que hace que nuestras vidas sean diferentes?. Pues sí, es verdad: nosotros mismos, nuestras tácticas de juego, conocer las trampas que hay en cada rincón de cada nivel; y sí, por supuesto, para tener esta sabiduría hace falta mucha práctica, muchas vidas perdidas en el camino, muchos “game over” con mal sabor de boca y que hubieran aparecido precediendo a nuestro pensamiento: “justo ahora que estaba a punto de pasarme esta pantalla tan difícil… ahora tendré que volver a empezar”… ¡Exacto! Volver a empezar. Eso es lo más difícil: conseguir recordar todo lo que ya habíamos vivido para intentar no volver a equivocarse en los mismos sitios. Porque, a pesar de ir con el máximo cuidado, de haber sido una persona precavida y haber conseguido todas las vidas posibles, cuando menos lo esperes puede aparecer "uno de los malos" al que tendrás que eliminar para poder seguir avanzando… y si aparece demasiado de sopetón, puede conseguir que tengas que empezar otra vez. Tienes que ser más rápido y más audaz.
Llegado el momento, después de mucho tiempo obsesionado con el juego, un estado de excitación puede hacerte creer que lo tienes dominado, que ya estás en la última pantalla y que te queda muy poco para pasártelo. Y puede que sea así, puede que lo consigas, a lo mejor llegas a la meta después de muchos esfuerzos y muchas horas seguidas jugando. Pero no olvides que esos estados duran poco, que tras los subidones de adrenalina vienen los bajones y que, si es difícil llegar a la cima, mucho más difícil es mantener un listón tan alto mucho tiempo.
lunes, 1 de junio de 2009
TU NOCHE ESPECIAL
Suena la melodía.
De forma contagiosa no puedes dejar de moverte al ritmo que ella te marca.
Algo inusual se apodera de tu cuerpo.
Te encuentras rodeado de gente desconocida y ves que nadie te mira.
Bueno… “yes, yes, yes”.
Alguien se ha dado cuenta de tu cambio de actitud y te conviertes en el centro de atención.
Pero no te importa.
La música ya te ha enganchado.
Y te ríes al verte de refilón en uno de los espejos.
“You give me a reason to live” (“me das una razón para vivir”): la frase no podía ser más acertada en esos momentos. La música te hace sentir más vivo que nunca.
Te subes a la barra para que los que se encuentran más alejados de ti puedan verte.
Ése no puedes ser tú.
Tú nunca harías algo así… pero al final va a resultar que sí, que eres tú.
“They don´t know what love is” (“ellos no saben lo que es el amor”, y tú has descubierto que te quieres a ti mismo más de lo que imaginabas… ¡bienvenido al club!).
No tienes ni una sola gota de alcohol en el cuerpo, pero actúas como si así fuera.
Hoy vas a olvidarte de ser esa persona llena de responsabilidades que siempre se preocupa en comportarse de la forma más políticamente correcta posible.
La gente ríe y aplaude.
Pero todo eso vuelve a ser algo que no te quita el sueño.
Lo único primordial es que son testigos de que te sientes vivo.
Deberían unirse a tu fiesta.
Quien lo haga no se arrepentirá.
Y parece que ya hay más de uno que está dispuesto a hacerlo.
“YOU CAN LEAVE YOUR HAT ON”… sí, déjate el sombrero puesto para taparte la cara y que nadie descubra quién es el responsable de haber revolucionado a todo el personal.

sábado, 30 de mayo de 2009
LÁGRIMAS DE ALEGRÍA
Aún somnolienta, me levanté de un salto y corrí hacia la procedencia de las voces. Y ahí estaba él, con su carita de ángel y su dulce sonrisa. No me lo podía creer. Ya estaba de nuevo con nosotros. "¿Ya ha pasado todo?", recuerdo que pregunté. Y me tiré a su cuello para abrazarle con fuerza. Él, tan inocente, se asustó. No comprendía por qué lloraba. Siempre le pusieron nervioso las lágrimas y, por eso, me las limpiaba fuertemente con el dorso de la mano de forma que casi me hacía daño. "No te preocupes. Lloro porque soy muy feliz", le dije para tranquilizarle y sin poder parar de reír.
Y todo volvió a ser como antes. No, miento, como antes no. Ahora todo era mejor. Él estaba mejor que nunca. Y ese estado de ánimo era contagioso.
Era dos de enero. La mejor forma de comenzar un nuevo año.

martes, 26 de mayo de 2009
La importancia de los pequeños detalles
Lo ves aparecer. Sabes que no hará como los demás. Él no te mirará con cara de pena y compasión para demostrarte con eso su apoyo. Él, simplemente, te dedica una mirada de comprensión. Sus palabras no son necesarias. Ya te lo ha “dicho” todo.

Comienzas a “descubrir” tu ciudad: ese longevo árbol que se mueve ligeramente por la suave brisa de la noche primaveral, la belleza de la calle mientras se encuentra vacía y sin nada que perturbe su silencio, el brillo del agua de la hermosa fuente donde tu amigo decide que os detengáis. Te deja un par de minutos para que te llenes de paz y tranquilidad y opta por cambiar de tema: los asuntos banales y triviales que lleváis tratando desde que os encontrasteis desaparecen y ahora… él te hace reír. Recordándote cualquier anécdota, haciéndote partícipe de alguna otra que él haya vivido y tú no o imitándote a algún conocido común, consigue que rías y rías sin parar hasta que te duele el costado y hasta que notas cómo los músculos de la cara están demasiado tensos. Y tú te animas y recuerdas alguna otra cosa que impida que vuestras risas cesen.
Al final, te despides de él. Le agradeces en silencio lo que ha hecho por ti. Ha sido tu mejor medicina sin ni siquiera tener que mencionar la enfermedad. No hacía falta.
lunes, 25 de mayo de 2009
La esperanza es lo último que se pierde

miércoles, 13 de mayo de 2009
Borrón y cuenta nueva

Ahora, ha llegado el momento. Ya no te da vergüenza salir a la calle luciendo esas antiestéticas cicatrices. Las llevas con orgullo, como heridas de guerra, y con ellas sigues con tu vida: el buen tiempo, los amigos, la familia, los planes de vacaciones… todo es buen motivo para disfrutar de la primavera de una vez.
domingo, 10 de mayo de 2009
TE ECHO DE MENOS

Puede que (casi) nada sea para siempre y que tengamos que aprender a pasar página, aunque nos cueste. La vida está llena de caminos y cada uno tenemos que hacer nuestro propio recorrido, dejando a muchas personas atrás pero, también, encontrando a otras muchas unos kilómetros más adelante. Solamente unos cuantos son los que terminan yendo de la mano con nosotros hasta el final.
miércoles, 6 de mayo de 2009
PESADILLAS ANTES DE DORMIR

Todos estaban allí, en fila india. Parecían estar en una cola donde se hubiesen reunido cada uno de los “tormentos que debes exterminar de tu vida”, personas que por muy diversas razones terminaron siendo parte de esa lista negra de “gente que te ha roto el corazón”. Si ya en su momento no pudiste soportarlos en solitario por todo el daño que te hicieron… ¿cómo hacerlo ahora cuando están todos juntos, uniendo sus fuerzas para intentar reabrir viejas cicatrices?. No soportas ver como el sujeto A se ríe mientras habla con el sujeto B, porque sabes que están hablando de ti. A lo mejor están diciéndose el uno al otro las jugarretas por las que te hicieron pasar: “lo mío fue peor que lo tuyo. Yo te gano”. Esa frase parece ser la más repetida en esa visible cola que no parece tener prisa por llegar a su destino.
Tú, después de tanto tiempo, crees no poder soportarlo. Por un momento agachas la mirada y necesitas apoyarte en la pared para intentar recordar cómo se respiraba. Al rato, con los pulmones llenos de aire, repasas a todos los integrantes uno por uno y miles de imágenes vienen a tu memoria. Si te estuvieras muriendo, pensarías que eso debe de ser la película de tu vida pasando en diapositivas.
Eres fuerte. Vamos, sabes que lo eres. Ninguna de esas personas te llega ni a la suela de los zapatos. Te hicieron daño porque descubrieron tus puntos débiles... pero ya has aprendido la lección. Y esta vez vas a ponerla en práctica. Reuniendo ese valor escondido que no creías poseer consigues seguir tu camino, con la cabeza bien alta y sin mirar ni una sola vez a esa cola incrédula que no deja de observarte. Lo has conseguido: ignorarlos ha sido la mejor venganza.
viernes, 1 de mayo de 2009
lunes, 27 de abril de 2009
¡¡¡QUÍTATE LA VENDA!!!
Te da miedo la oscuridad, no te gusta estar entre tinieblas (sobre todo, cuando estás sola) y, a pesar de todo esto, decidiste arriesgarte: algo te hizo probar. Dicen que lo mejor para superar tus miedos es enfrentarte a ellos y por eso elegiste ponerte una venda en los ojos para andar a ciegas por el mundo. Al principio te daba risa, te hacía gracia ese gran cambio que le habías dado a tu vida. Era una experiencia nueva que podría tener un capítulo importante en la triste y aburrida historia de tu existencia. Pero sabías que la euforia del momento pasaría y que pronto todos tus miedos volverían a invadirte con fuerza. A pesar de saberlo, de tener demasiada conciencia de ello, no querías pensar. Deseabas dejar la mente en blanco y vivir el momento. Pensabas que era mejor cambiar de táctica aunque el resultado fuera el mismo. ¿Qué más daba sufrir por un motivo o por otro si al fin y al cabo el sufrimiento era el sentimiento del que no ibas a poder deshacerte?.

Por eso lo hiciste: “antes de pasarlo mal al menos así me voy a llevar también una satisfacción”, pensabas sin cesar para intentar auto-convencerte de tu decisión. En un primer momento funcionó, te hiciste ilusiones demasiado pronto y pensabas que todo iba por buen camino para superar tu miedo. ¡Qué ingenua fuiste! Precisamente tú, sabiendo todo lo que sabes, te dejas engañar como si fueses una chiquilla inexperta.
A pesar de todo, aunque has confirmado y reconfirmado mil veces tus dudas, sigues intentando aferrarte a esa venda que lo único que te está haciendo es dejarte una profunda marca en las sienes de lo fuertemente atado que tienes el nudo. Creo que ya te has dado cuenta, sospecho que ya has sentido la revelación que te quiere llevar de nuevo a mirar al mundo a los ojos sin ningún obstáculo que te impida verlo al 100%. Ya sólo te falta entonces encontrar ese nudo y desatarlo poco a poco, con cuidado para que no te lastime en tus heridas y, sobre todo, con paciencia y decisión.